APPLE STORE MADRID
Este proyecto de la tienda Apple de Madrid, se terminó en junio de 2014, bajo la dirección del Estudio de Arquitectura Foster.
Un detalle histórico fue la retirada del cartel de Tío Pepe que lo hicieron emblemático durante mucho tiempo.
La sede actual fue inaugurada en el verano del año 1864 y albergaba el Hotel París (también llamado Grand Hôtel de París o Fonda de París). Fue uno de los primeros hoteles en Madrid con cuartos de baño en cada habitación, servicio de habitación, recepción, table d’hôte, salón de lectura, etc. Eran conocidos durante el siglo XIX los altos precios de la estancia en el hotel; muchos personajes famosos, como Rubén Darío, se alojaron en sus habitaciones.
En 1895 el Hotel tiene su primera reforma, se transforman las habitaciones, introduce un ascensor e iluminación eléctricos. El hotel vivió momentos de esplendor hasta comienzos del siglo XX. En 1935 se puso en su fachada un cartel luminoso de Gonzalez Byass, cartel que se cambió al de Tío Pepe. Tras la Guerra Civil el hotel sobrevive gracias a las vistas a la Puerta del Sol. Finalmente cerró en mayo de 2006.
En 2011 comenzaron los trabajos de restauración y Apple se reservó el espacio del antiguo Café de la Montaña o Café Imperial, que era un café de tertulias intelectuales que se hizo famoso en 1899 por ser aquel en el que perdió un brazo Ramón María del Valle-Inclán a causa de una disputa con el periodista Manuel Bueno.
Cuando va a hacer una tienda nueva, Apple hace un trabajo de estudio previo para conservar la esencia de este. No se trata de invadir la construcción, sino de volver a darle vida ayudada por la tienda.
En esta tienda, y se han restaurado manteniendo una apariencia similar: techos de madera y las mismas vigas totalmente renovadas, dan una apariencia espectacular y un carisma distinto a esta nueva tienda.
En cuanto a los cristales, que es nuestro trabajo, se han colocado escaparates de gran tamaño, en vidrio laminado con espesor 6+6, con un tratamiento antirreflejo, se ha colocado el vidrio integrándolo dentro de los elementos arquitectónicos protegidos de la fachada, tanto en la planta de arriba como la de abajo. así se ha conseguido que en toda la tienda haya luz natural a raudales.
También se ha mantenido el antiguo lucernario del hotel renovando os vidrios con un tratamiento de control solar. La planta se ilumina por su tragaluz triangular de cristal que deja pasar la luz.